Ayer noche, rendido por una semana especialmente intensa laboralmente, me encontré haciendo zapping a la hora punta de los flashes noticieros y con asombro asistí mudo a este circo de tres pistas freaky que es nuestro mundo: en portada, tres noticias competían por acaparar mi interés, dos de las cuales eran referidas a actos de terrorismo (uno de ellos se demostró al final que era un plan llevado a cabo con el propósito publicitar una serie animada americana en la que los protagonistas eran una hamburguesa y una bolsa de patas fritas; y bien que lo consiguieron, el locutor al final de la noticia, anunciaba que la serie de marras será emitida en marzo) http://www.laverdad.es/alicante/prensa/20070202/mundo/guerra-mundos-boston_20070202.html y una tercera trataba de un acto de solidaridad (el apagón de las 19:55).
Fue una de las noticia referidas al terrorismo objeto del propósito de esta entrada en el Blog.
La noticia, resumida escuetamente, presentaba a tres jóvenes impresentables, imberbes, espinillosos, patizambos, de sonrisa remendada en Vitaldent, que habían sido detenidos tratando de pasar la frontera desde Francia llevando en su furgoneta no se cuantos cientos de kilos de material para volar por los aires los ánimos, esperanzas, vidas, pesares, sueños, proyectos de los seres humanos que por ningún particular especial, da la casualidad que viven en esta zona geográfica que está desde los pirineos para abajo limitando con el mar mediterráneo por un lado y el atlántico por el otro.
Uno de los “capullos” declaraba que quería desvincularse del tema, que al principio le había parecido que el propósito era “bonito” pero que ya no (el “capullo” se estaría fumando petas viniendo de Francia con su carga letal en la furgo, carcajeándose en complicidad con los otros dos pensando en que serían héroes a la vuelta o algo así, realidad que se le vino abajo cuando se meó en los pantalones en el cuartelillo).
Este mamón ha tenido la suerte (no lo sabe bien) de que lo han cogido y cuando le han puesto detrás del cristal declarando ante un juez, ha aprendido la rotundidad de la realidad que estaba negando por “romanticismo” hacia una causa que no por romántica es más justa: el terrorismo.
Este es un mensaje para mis hermanos, para aquellos que alguna vez puedan verse tentados por las promesas del terrorismo, a quienes tanto aprecio y amo: ¿sufrís?, ¿os sentís solos?, ¿la vida os parece injusta y ruda en ocasiones?
Pues como a todos.
No os dejéis engañar por esa idea romántica de “nosotros contra el opresor”, de “ellos contra nosotros”, porque es una mentira surgida de una mente enferma y mediocre, de un alma ruin y baja. Matando, poniendo bombas, inmolándote no conseguirás ese ansiado premio prometido de algo mejor; la muerte sólo lleva a más muerte, mentiras a mentiras, sufrimiento a más sufrimiento.
Te equivocas si haces depender tu propio bienestar de causas ajenas a ti, de tu entorno, de otras personas; el único responsable de tu propio bienestar eres tú mismo. No dejes que otros tengan poder sobre ti, como dice el dicho: “Si lloras no podrás ver las estrellas”, si apuntan al cielo, no te quedes mirando el dedo, ve más allá, más allá de las mentiras fanáticas del espíritu bajo que con malicia te equivoca en tu camino dándote un arma para matar: en ti mismo está el poder, ni en tu entorno, ni en otros. No existe opresor, sólo un montón de seres humanos que tratamos de hacer lo mejor posible esta levedad que es vivir, tirar para adelante, tratar de mejorar lo que nos han dado.
Y si hay opresor, juntos podemos prevalecer pacíficamente.
Aprendamos del pasado, aprendamos de los mejores; Malcom X, Gandhi, Martin Luther King.
Fuente: “Why we can´t Wait” Martin Luther King
Fue una de las noticia referidas al terrorismo objeto del propósito de esta entrada en el Blog.
La noticia, resumida escuetamente, presentaba a tres jóvenes impresentables, imberbes, espinillosos, patizambos, de sonrisa remendada en Vitaldent, que habían sido detenidos tratando de pasar la frontera desde Francia llevando en su furgoneta no se cuantos cientos de kilos de material para volar por los aires los ánimos, esperanzas, vidas, pesares, sueños, proyectos de los seres humanos que por ningún particular especial, da la casualidad que viven en esta zona geográfica que está desde los pirineos para abajo limitando con el mar mediterráneo por un lado y el atlántico por el otro.
Uno de los “capullos” declaraba que quería desvincularse del tema, que al principio le había parecido que el propósito era “bonito” pero que ya no (el “capullo” se estaría fumando petas viniendo de Francia con su carga letal en la furgo, carcajeándose en complicidad con los otros dos pensando en que serían héroes a la vuelta o algo así, realidad que se le vino abajo cuando se meó en los pantalones en el cuartelillo).
Este mamón ha tenido la suerte (no lo sabe bien) de que lo han cogido y cuando le han puesto detrás del cristal declarando ante un juez, ha aprendido la rotundidad de la realidad que estaba negando por “romanticismo” hacia una causa que no por romántica es más justa: el terrorismo.
Este es un mensaje para mis hermanos, para aquellos que alguna vez puedan verse tentados por las promesas del terrorismo, a quienes tanto aprecio y amo: ¿sufrís?, ¿os sentís solos?, ¿la vida os parece injusta y ruda en ocasiones?
Pues como a todos.
No os dejéis engañar por esa idea romántica de “nosotros contra el opresor”, de “ellos contra nosotros”, porque es una mentira surgida de una mente enferma y mediocre, de un alma ruin y baja. Matando, poniendo bombas, inmolándote no conseguirás ese ansiado premio prometido de algo mejor; la muerte sólo lleva a más muerte, mentiras a mentiras, sufrimiento a más sufrimiento.
Te equivocas si haces depender tu propio bienestar de causas ajenas a ti, de tu entorno, de otras personas; el único responsable de tu propio bienestar eres tú mismo. No dejes que otros tengan poder sobre ti, como dice el dicho: “Si lloras no podrás ver las estrellas”, si apuntan al cielo, no te quedes mirando el dedo, ve más allá, más allá de las mentiras fanáticas del espíritu bajo que con malicia te equivoca en tu camino dándote un arma para matar: en ti mismo está el poder, ni en tu entorno, ni en otros. No existe opresor, sólo un montón de seres humanos que tratamos de hacer lo mejor posible esta levedad que es vivir, tirar para adelante, tratar de mejorar lo que nos han dado.
Y si hay opresor, juntos podemos prevalecer pacíficamente.
Aprendamos del pasado, aprendamos de los mejores; Malcom X, Gandhi, Martin Luther King.
Fuente: “Why we can´t Wait” Martin Luther King
By Tealdog 2007
2 comentarios:
Muy bueno tío, muy bueno.
Si señor. Muy bueno.
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